TUYO

Cuando me bloqueo y no soy capaz de pensar con claridad, me siento ante una hoja en blanco para que me diga lo que estoy pensando, lo que estoy sintiendo… después me leo y consigo escucharme….

Tú que has hecho de este día uno de esos que guardaré en mi rincón de los momentos especiales, que junto a ti me has llevado a lugares nuevos, donde no me quería perder nada de lo que llegaba a mis sentidos, recordando aún ahora imágenes, olores y hasta la música que los acompañaba…

Haciendo cosas por vez primera que me hacían sentir como una niña pequeña que comienza a conocer el mundo, volviendo a mi interior esa sensación de aprender cosas nuevas, de vivir…

Y tu estabas ahí, creadora de esos momentos, con tu sonrisa, ese brillo en tus ojos, la melodía de tus palabras con esa chispa en cada frase, que podía sentir y no solo en mis oídos.

Me has llevado más cerca del cielo, has pintado un día de verdes esperanzas, has puesto un río en mi mirada, me has enseñado el reflejo del mundo, que aunque parezca que todo esta del revés, tan solo hay que alzar un poco la vista para ver todo como ha de ser.

Me has enseñado como un olor dulce al contacto con el aire huele a naturaleza, como una mirada transmite una sonrisa, y la sonrisa la complicidad… y todo eso…todo eso me lleva a ti y todo eso también me encuentra a mí.

Aún sabiendo que no debo tratar de acercarme por aquello de las cosas bien hechas, por aquello de la conciencia y el respeto, por la sinceridad que siempre tienes, y porque todo ese mundo perfecto que hoy he vivido a tu lado, debía seguir siendo perfecto mañana.

Cuando volvía me di cuenta que no volvía sola, pues tu venias conmigo en forma de recuerdo, pero no un recuerdo cualquiera, sino un recuerdo vivo, capaz de hacerme sonreír, capaz de hacerme más feliz.

Gracias por este día, gracias por hacerme feliz.